Cuentos de un escritor sin éxito intenta descubrir lo que hay de monstruoso, de fatal, en nuestra realidad más cotidiana. El denominador común entre sus personajes reside en su profunda indefensión ante el mundo que le toca vivir, un mundo que sueñan más hermoso, más digno, y que acaba traicionando a menudo su buena fe. Todos ellos hacen una apuesta por la ilusión, y así nos encontramos con tipos dispuestos a creer una vez más en milagros tan desprestigiados como la suerte, el amor perfecto, o el poder ilimitado de su propia obstinación. Un hombre busca en diversos psiquiátricos a los personajes que lo convertirán en afamado escritor; una mujer ve en la repentina amnesia de su ex-novio la posibilidad de corregir los errores de su antigua relación: otro tipo recibe un par de paquetes junto a un largo beso de una bella mujer y, aun sabiendo que se trata de una confusión, es capaz de creer que ese malentendido le brindará la oportunidad de cambiar su vida para siempre... Todos nos sentimos fracasados de alguna manera al trazar a diario la historia de nuestras vidas con el pulso indeciso: nuestras manos de escritores mediocres casi nunca consiguen que el desarrollo de esa historia se asemeje siquiera al que planeamos con tanta ilusión insensata, con tanto atrevimiento.